sábado, 18 de julio de 2015

DE LA RECUPERACIÓN Y PÉRDIDA DE LOS APELLIDOS

Usbek,
parece mentira, pero según las investigaciones de Hugh Thomas (Una Historia del Mundo, Barcelona: Grijalbo) el individualismo del Renacimiento se manifestó a través de la recuperación de los apellidos, junto al nombre propio. Hasta que llegaron los del PRO y se apropiarion de los nombres.
El nombre y apellido habían sido una costumbre que había existido en Roma, las invasiones bárbaras del siglo V la habáin hecho desaparecer.
Recién en el siglo XIII, en Francia, se comenzó a añadir un sobrenombre o un segundo nombre, que se hizo hereditario dentro de las familias "ilustres".
En tanto, los criados, los esclavos, tomaban la más d elas veces, el apellido de sus dueños.
En la Europa moderna se comenzó a exigir que todas las personas tuvieran nombre propio y apellido. Esa costumbre se extendió al resto del mundo.
Las familias de poder económico y político se esforzaron por asegurar la supervivencia del apellido, como signo de distinción hasta se hacían pintar autoretratos.
Paradójicamente el individualismo del siglo XXI elimina el apellido apropiándose de un nombre como distintivo y único. Al parecer habría un solo Mauricio, un solo Horacio, una sola Gabriela, y así.Será que conviene ocultar?




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